MED  

Estoy sentada dispuesta a contar mi historia, una historia llena de tantos sentimientos encontrados, pero a mi mente viene una palabra y es FUTURO. No es fácil empezar a relatar una parte de mi vida… pero creo que el mejor comienzo es por el final, final que no tiene fin. Y así un 8 de septiembre de 2016 llega a nuestras vidas un ser de luz, una ser tan esperado, por toda la familia. Llega con 2.850 Kg y después de 13 días de estar en neonatología a 500 km de nuestro hogar volvemos a casa, a una vida tan diferente como se puede tener con la llegada de un recién nacido. Hoy esta personita está por comenzar el jardín maternal, es un niño feliz, inquieto simpático, divertido…tan lleno de vida, una vida que cuidamos y protegimos desde el mismo momento en que nos enteramos que llegaba. Aunque esta noticia llego con otra aparejada, una noticia inesperada de esas que nunca querría haber recibido, pero la vida es así ¡¡¡ Con test de embarazo positivo vamos hacer la consulta de rutina con mi ginecólogo, el mismo que trajo al mundo a mis otros dos hijos, en el presente tienen 11 y 9 años.

El día previo a la consulta siento en mi axila derecha un bulto, si bien me preocupe soy una persona muy positiva y no tome conciencia de cuál podría ser la gravedad de la situación. Por eso al llegar al consultorio y tras una ecografía donde revelaba que un pequeño ser se estaba gestando llega mi comentario del bulto encontrado. La expresión de mi doctor fue terrible, pero sin muchos adelantos nos mandó hacer una mamografía y ecografía mamaria. Nunca me voy olvidar cuando la secretaria me alcanza los resultados, ella me da un beso y me dice Suerte ¡¡ lo sentí como el beso de la muerte y ahí me di cuenta que mis estudios no habían salido bien. Volvimos al consultorio y nos leyeron los resultados…Cáncer de mama tipo 3 con un embarazo de 2 meses. El doctor se sorprendió ya que no es frecuente las dos cosas al mismo tiempo y con 41 años tampoco estaba dentro del rango frecuente de pacientes oncológicos. Nos puso al tanto de pasos a seguir y nos habló de las dificultades que podría tener ese bebe. Rápidamente nos derivó a La plata. A tres días de haber recibido el diagnostico cumplí años…mi recuerdo es una almuerzo familiar tan fingido, toda la familia estaba sabiendo de mi enfermedad y yo tratando de que nada cambie, que me vean entera, positiva como restando importancia a todo lo que se venía, tratando de darles seguridad a ellos. Ya en La Plata, un grupo de doctores deciden que lo mejor para mi situación es una operación.

Así el 23 de marzo y a 20 días de recibido el diagnostico me realizan una mastectomía parcial (solo un cuadrante) y la escisión de 20 ganglios axilares. Y continuamos con quimioterapia primero 4 cada 21 días y luego las semanales. Con respecto al embarazo me advierten de las posibles complicaciones como afecciones cardíacas y otras que mi mente olvido. Recuerdo  cuando el doctor me explicaba de los cuidados que debía tener ya que era una persona inmunosuprimida, mi mundo se vino abajo cuando me recomendó que si mis hijos se enfermaban yo nos los podía cuidar…fue terrible pensar que si ellos me necesitaban yo no iba poder estar a su lado…tuve la suerte que en todo este proceso nunca nadie enfermo. Soy profesional veterinaria por lo que me fue más fácil entender de lo que estábamos hablando y mi curiosidad me llevó a leer todo lo que encontraba, algunas veces me sirvió la información y otras veces solo hizo que mi cabeza no parara de pensar. Preparando a mi entorno cercano para los cambios físicos que se avecinaban me corte el pelo, a lo garzón…fue un shock para mi hijo mayor: Mama salió de casa a la peluquería y cuando volvió ya no estaba igual¡¡¡ Entonces me puse a pensar cómo hacer para que cuando realmente me tuviera que pelar no generara esta situación tan drástica para ellos. Cuando llego el momento de hacerlo en la tercer quimio, nos juntamos los tres en el baño y les propuse que ellos me pelaran, empezó como un juego, me hacían estilos de jugadores de fútbol,  un poco uno otro poco otro hasta que quede pelada, y para ellos al hacerlos partícipes de ese momento lo tomaron como algo más natural, yo por dentro creo que me despedazaba y Papa también se pelo para hacer equipo conmigo¡¡¡ Cuando me dijeron que el pelo se iba a caer, pensé bueno no importa es algo secundario, en un par de meses vuelve a crecer, pero cuando realmente sucedió me di cuenta de la importancia y del significado. Pasaron las quimio, tuve otra vez la suerte de no tener ningún tipo de  síntomas, salíamos de casa a las dos de la mañana para llegar a La Plata a las 8, hacerme la quimio y volver. Tenía una vida que continuar, escuela, actividades, trabajo, casa. Estaba planificada la cesárea a los 8 meses de gestación así yo podría seguir con el tratamiento (la segunda parte de la quimio y 36 sesiones de rayos).

Cuando nació mi bebe, el tercer varón y saber que estaba en perfectas condiciones renací literalmente. Lo dejan en la Neo para supervisar que este todo bien y como no se alimentaba correctamente nos dejan internados, mis pensamientos fueron de culpa, porque si yo no hubiera enfermado él no tendría que haberse quedado ahí, estaba llorando en un rincón se acercó el sacerdote del hospital y tras una breve charla todo volvió a iluminarse. Fueron días difíciles, experimente las realidades de otras familias, situaciones extremas que ahí se viven. Vi como las madres/padres sin conocerse se apoyan se ayudan se contienen. Y me di cuenta de la importancia de la Vida.

Estoy convencida que todo tiene un porque, yo me creía inmortal y me di cuenta que la vida hay que vivirla, disfrutar cada día que transcurre con alegría. Atravesar esta enfermedad me enseño más de lo que esperaba, me enseñó a valorar la vida entre tantas cosas. Con mis tres hijos nos hicimos una remeras, el eslogan es: CANCER CON VIDA…y nos presentamos a algunas maratones para dejar el mensaje que Si se puede¡¡¡ Se puede apostar a la vida…

Hoy mi tratamiento es solo vía oral con los controles cada seis meses, y por el momento todo marcha sobre ruedas. Las situaciones y sentimientos son inacabables pero quise reflejar un poco de lo vivido. Demás está decir el apoyo y el amor de familia, amigos y de gente que se acercó o se acercan. Estoy en mi casa, con mi familia, mi vida continua… pero con una mirada hacia el Futuro.