Suricata

Mientras escucho un mantra que acaricia mi alma, decido ponerme a escribir…entre lágrimas.

Un día de noviembre del año 2017, del trabajo me mandan a una capacitación en  un reconocido laboratorio por una nueva medicación para cáncer de pulmón…me capacita una oncóloga, doctora muy joven, que hablando mi mismo idioma y con diapositivas y videos, me entrena al fin…mis ojos no podían dejar de ver con gran asombro; todo lo que ese enemigo mío, me estaba haciendo…flasheé por un instante sin parpadear…nos abrazamos, agradecí cada respuesta a mis incesantes preguntas…ya estaba lista para ayudar a mis pacientes en cada consulta; sin dejar de pensar que quizá yo sería uno más de ellos.

Unos días después, perseguida y abrumada, pedí a mi médico una tomografía, porque la ansiedad me carcomía por dentro, si bien no había tenido nunca síntoma alguno. A unos días de casi vencer la orden del estudio, me decido a pedir turno.  El resultado no muy alentador; pequeña mancha en pulmón derecho…compatible con proceso neoformativo primario.

A la brevedad veo a un cirujano especialista en tórax; y ahí comienzan todos los estudios correspondientes para dar bien con el diagnóstico y estadio de mi enfermedad; entre ellos, pet, biopsia, punción, etc. Se comprueba lo que obvio a esta altura sospechaba.

Con el diagnóstico de la enfermedad empieza tipo un calvario, una regresión, y una visión hacia el futuro…temes a la muerte temprana, a eso que aún no pudiste concretar o realizar ni arreglar en tu vida y de tu entorno, pensás  sólo en dejar las cosas ordenadas, y sólo eso, en los demás; sin saber que ahora lo más importante es que debes preocuparte por vos mismo, la cabeza te funciona a mil revoluciones por minuto, justo cuando lo que necesitas es estar en paz, en armonía y tranquilidad para afrontar lo que se viene; sé que uno se siente agobiado y agotado, demasiados médicos, demasiados estudios…pero en fin…un día pude comprender, que es mi vida, eso es lo que vale, y hay que hacerlo.

En marzo, exactamente el día de la mujer, me operan, una lobectomía superior en pulmón derecho; bastante bien he salido de ella; luego de una neumonía post cirugía, a los 12 días me dan el alta. Y luego de tres largos meses de recuperación; intento seguir con la vida cotidiana, volviendo a trabajar y al mundo de a poco. No voy a mentir, me he sentido bastante bien; y sigue mi lucha contra mi enemigo feroz, que aún no logré dejar, me siento cobarde por ello.

Luego de unos meses, comienzan los controles, justamente en mayo en una nueva tomografía, se ve un ganglio en mediastino, pero de insignificante tamaño…uh, respiré quizá un poco aliviada, agradeciendo a la vida misma. Por unos meses la vida sigue casi su ritmo habitual, con sus idas y vueltas, compromisos y obligaciones, sin descuidar cada tanto las consultas médicas pertinentes. –

Pasado otros meses, en noviembre del mismo año, se viene el control por Pet. Resultado no alentador, dicho ganglio ha crecido, ya es adenocarcinoma. Regresión total en mi vida, otra vez, volver atrás, a pensar, repensar. Tristeza y todo eso que conlleva esta enfermedad.

Se decide hacer nueva biopsia, ya un poco más complicada por el sitio donde se hallaba, entre idas y vueltas, ateneos con mis grandes médicos, que siempre han actuado en conjunto, resuelven comenzar con tratamiento paliativo. Veinticinco sesiones de rayos conjuntamente con dos quimioterapias. Todo nuevo para mí, de que se tratará, sólo eso pensé, pero bueno, ya estaba jugada y me entregué incondicionalmente a la decisión de ellos.

El día 17 de diciembre comienzo con rayos, luego de los tatuajes que marcan la zona para aplicación. – Asisto todos los días de lunes a viernes, con un grupo maravilloso, tanto técnicos, médicos como pacientes que compartimos cada día nuestra enfermedad en distintos aspectos y estadios. Un grupo muy humano, increíble lo que une esta enfermedad, sólo agradezco a cada uno de esos pacientes por el apoyo incondicional que nos damos día a día.

El 28 de diciembre llega mi primera quimio: REBELION EN MI CUERPO, eso siento. Entre célula y célula, buena o mala, lucha interna a no más poder, no descansan, las siento pelear, ahí siempre están dando batalla…y yo, esperando, digo: ¡¡muerte al bicho YA!!, ¡¡y así será!! Eso debo esperar: mientras tanto, una revolución interna se va apoderando de mí, una guerra dentro, de poderosas células; que el envase, mi cuerpo, no logra comprender, que pronto aprenderá… ahí están, las siento peleando, pero volcando la vida a la realidad, SIEMPRE EN ALGUN MOMENTO, LOS BUENOS TRIUNFAN… Es una loca pelea dentro de mi cuerpo, le doy batalla, y agotada en mi cama, espero…con náuseas, vómitos, dolor de cabeza, diarrea, fiebre y todo lo que ello acarrea.

Continúo sin dejar pasar sólo una sesión de rayos, ya están haciendo sus efectos, quemaduras en piel, dolor al tragar…en fin, por ahora nada que no sea soportable… Llega el 18/01/2019 mi otra quimio, sinceramente, más preparada que la anterior, la paso bastante bien. Sin grandes sobresaltos. Sólo cansancio que no pasa con dormir, grandes insomnios y una gran incertidumbre…

Ya faltan pocas sesiones de rayos, termino en una semana, pero han hecho estrago en mí, gran quemadura en piel, y ya no puedo comer absolutamente nada sólido, apenas algo líquido, he bajado mucho de peso, pero nada me detiene, sé que en unos días podré ingerir alimento y repuntar obviamente. TENGO MUCHAS GANAS DE VIVIR, y todo lo que ayude a controlar mi enfermedad, es bienvenido a mi vida, nunca fui obediente, he sido muy caprichosa, siempre muy independiente, pero esta vez me ganaron y sólo hago lo que los médicos dicen; leonina vencida? No, jaja. Aprendí que a veces es necesario ver y escuchar a los demás, sólo eso…

Hoy 23/01/2019 he terminado mi primer tratamiento paliativo, cansada, pero feliz de haberlo llevado adelante, más allá de los síntomas que no me dejan ser… fui capaz y así lo seré de ahora en más…. Sé que no será el único tratamiento, por ahora sólo esperar, resultados de próximos estudios…

PORQUE ¿SABES? QUIERO VIVIR, QUIERO SER FELIZ, QUIERO CONOCER A MIS NIETOS, QUIERO ESCRIBIR UN LIBRO Y PLANTAR UN ARBOL…  ¡¡¡Y ASI SERA!!!