Sus beneficios en relación a una internación hospitalaria o clínica

Dentro de la Medicina, la capacidad de comprender, enfrentar y manejar con efectividad y sentido bioético situaciones de salud y enfermedad a nivel individual, familiar y colectivo, se convierte en uno de los objetivos fundamentales, para ello estudia al ser humano en su totalidad.

Sin embargo cuando nos encontramos con el paciente que ya no tiene un período prolongado de sobrevida global y su diagnóstico es definitivo, nos preguntamos, qué pasa con su atención, con ese tiempo que transcurrirá hasta llegar al final y, bajo qué condiciones lo hará.

Allí, encontramos los cuidados paliativos, que tienen como premisa fundamental, no aplicar procedimientos invasivos/agresivos, conservar al paciente sin dolor y acompañarlo a nivel anímico; entre otros.

Si bien, se piensa que estos cuidados solo se dan ante un diagnóstico sin posibilidad curativa, los mismos pueden brindarse a otros pacientes, por ejemplo, pacientes con dolores o enfermedades crónicas, invalidantes y otras.

La internación domiciliaria, permite que muchos pacientes reciban atención en la calidez de su hogar.

Algunos de los beneficios de una internación en domicilio:

  • Contacto directo con su propio ambiente, su hogar, buscando la mejora desde el punto de vista cognitivo.
  • Mayor contacto con el núcleo familiar. Comodidad en la atención y la asistencia de éstos hacia el paciente.
  • Contacto permanente con el mismo equipo interdisciplinario.
  • Mejora en la relación equipo médico-paciente, logrando un seguimiento y trato exclusivo.
  • Evitar internaciones prolongadas, que lleguen a la institucionalización del paciente.
  • Evitar un desgaste psicológico.
  • Evitar infecciones intrahospitalarias que puedan desencadenar en una muerte repentinamente.
  • Los procedimientos médicos pueden asemejarse en calidad a los de un centro de salud, muchas veces superarlos.

Es así, que el cuidado y la asistencia domiciliaria, goza de importantes beneficios, a nivel psicológico, biológico y social, no solo para el paciente sino para la toda la familia.


Lic. Tamara Boguslawski

Especialista en Psicología y Gerontología
tamaraboguslawski@psi.uba.ar